Algunas empresas parece que jueguen al escondite. Por favor, no hagas eso. Di siempre dónde estás. Desde dónde vendes y a dónde estás dispuesto a vender.
Esto es especialmente importante si ofreces productos físicos o servicios presenciales.
Muchos negocios olvidan poner esta información en sus webs y perfiles sociales. Este descuido puede hacerles perder numerosas ventas.
¿Por qué decir dónde estás?
¿Atiendes físicamente?
Si eres un negocio local y tu objetivo es que acudan a tu establecimiento, parece que no hay duda. Si no indicas tu dirección, nadie podrá ir a verte.
Por tanto, da facilidades. Que no tengan que indagar. Además, si un visitante online ve que estás cerca, es posible que se plantee visitarte.
Si no indicas tu dirección, nadie podrá ir a verte.
Este caso no requiere mucha más explicación.
¿Eres un ecommerce?
«¿Me llegará el envío?» Tienes que evitar que el visitante se haga esta pregunta.
¿Tú comprarías en una tienda online que no reparte en tu ciudad? Claramente no.
Si indicas dónde estás y a dónde vendes, aumentas las posibilidades de venta.
Por ello debes despejar esa duda lo antes posible. Si el usuario está fuera de tu rango de acción, su visita no te interesa. Sí, engordará el tráfico de la web, pero también te estropeará la tasa de conversión. No te tu público objetivo. Deja que se vaya. Y si no entra, mejor.
Sin embargo, si indicas dónde estás y a dónde vendes, aumentas las posibilidades de que la sesión concluya con una venta.
¿Vendes servicios a distancia?
Este es el caso más difícil de asimilar. ¿Si no van a venir, ni les voy a enviar, para qué decir dónde estoy?
Hay una razón muy importante: Pese a la globalización, existen las fronteras.
Esto afecta a tu negocio en dos aspectos:
- Las necesidades del cliente pueden depender de su ubicación.
- No puedes ignorar la fiscalidad.
Necesidades y ubicación
La cultura y las leyes afectan al modo concreto en que actúan las personas.
Si ofreces asesoría legal o fiscal, deberás limitarte a los territorios de los que domines las leyes.
Pese a la globalización, existen las fronteras.
Del mismo modo, los gustos y prioridades de las personas varían con la geografía. Las estrategias de ventas que triunfan en un lugar, no siempre valen en otro. En consecuencia, solo podrás asesorar con éxito quienes se encuentren en determinadas áreas.
Fiscalidad
Para facturar a empresas regiones necesitarás poner en orden tus permisos, de modo que declares tus beneficios y pagues los impuestos que te correspondan en el lugar correcto.
En algunas ocasiones esto no resulta demasiado fácil. Por tanto, deberás decidir si te compensa internacionalizarte y de qué modo.
En resumen
Es importante indicar siempre dónde estás y cuál es tu área trabajo.
De manera especial, debes hacerlo cuando tus servicios sean presenciales o requieran envío. Pero también si prestas servicios a distancia.