
Ven Espíritu ven,
y llénanos Señor
con tu preciosa unción. (x2)
Purifícanos y lávanos
renuévanos, restáuranos Señor
con tu poder
purifícanos y lávanos
renuévanos, restáuranos Señor
te queremos conocer.
¿Cómo actuarías hoy, Señor
Si tuvieses mis ojos y mis manos
Si tuvieses mi energía y mi tiempo
Mi familia, amigos y trabajo
Pues hoy te dejo que seas yo,
¡que seas Tú, quien viva en mí,
quien viva en mí!
Por eso Padre, transfórmame
todo en Cristo
para que sea el Hijo entre los
hombres
Quiero ser tú, el Hijo, que pasa hoy
por el mundo:
transmitiendo tu mirada y tu
consuelo,
llevando tu paz, tu ayuda y tu palabra
al mundo entero
realizando tu servicio… tu entrega y
tu amor
Pues hoy te dejo que seas yo,
¡que seas Tú quien viva en mí,
quien viva en mí!
Por eso Padre, transfórmame todo
en Cristo,
para que sea el Hijo entre los
hombres.
Pues hoy te dejo que seas yo,
¡que seas Tú quien viva en mí,
quien viva en mí!
Por eso Padre, transfórmame todo
en Cristo,
para que sea el Hijo entre los
hombres.
En aquel tiempo, se acerca a Jesús un leproso, suplicándole de rodillas: «Si quieres, puedes limpiarme». Compadecido, extendió la mano y lo tocó diciendo:
«Quiero: queda limpio.» La lepra se le quitó inmediatamente y quedó limpio. Él lo despidió, encargándole severamente:
«No se lo digas a nadie; pero para que conste, ve a presentarte al sacerdote y ofrece por tu purificación lo que mandó Moisés, para que les sirva de testimonio.»
Pero cuando se fue, empezó a pregonar bien alto y a divulgar el hecho, de modo que Jesús ya no podía entrar abiertamente en ningún pueblo; se quedaba fuera, en lugares solitarios; y aun así acudían a él de todas partes.
Voz en Off
Cansado, vivo cansado, vivo en una imperceptible tensión interior que ha estallado, me rompo.
¡Impuro! ¡Impuro! Voy pregonando de mi mismo en mi caminar. Me aislo, siempre rodeado de gente, pero cada vez me aislo más, me rodeo de mi propia oscuridad, pues así me siento, impuro, indigno de ser amado, de ser recibido, de ser tocado. Pregono y me condeno a mi propia perdición: individuo aislado, no entiendo ni de soledad ni de comunión.
¡Impuro! Me aislo hasta de mi mismo, me he perdido en las sendas oscuras que rodean mi corazón: soy malo, soy impura, todo lo hago mal…, y no alcanzo a ver la luz y la verdad inscrita en lo profundo de mi ser.
¡Impuro! Ni siquiera puedo aguantar la Mirada del Todopoderoso, ¿Como va a ser cierto que me amas, a mí, cubierto de pobredumbre? ¿No exige acaso tu justicia que sea arrojado a la nada y el sinsentido?
Cansado, camino por la vida como una sombra de mi mismo, y sin embargo, hoy vengo ilusionado, pues me han hablado de un tal Jesús, y ha generado una fuerza Misteriosa en mi interior que me atraia hacia Ti, frente a quien me postro ahora.
Miro a Tus Ojos, mi corazón estalla, han encontrado Esperanza, han encontrado Vida. Ya no quiero vivir preso, ¡Si quieres, puedes limpiarme!
Tan sencillo, tan solo un deseo, una súplica…
Y retumba mi corazón con Tu Palabra, ¡Quiero! Queda limpio de toda la oscuridad y pobredumbre que te mata en vida. Queda limpio de la mentira y el espejismo de la nada.
Me tocas, y una corriente de Vida y Amor me estremece…
Ya no soy un ser aislado, mi soledad es ahora habitada por Ti, Fuego Eterno. Ahora soy yo, con todos ellos, mis hermanos. Mi vida ya no es mas un lamento de aflicción, sino que mi vida es un canto de alabanza
He decidido que no te vas sin decirte
algo que está pasando de verdad.
Un loco anda suelto enamorado, se le
cae la baba, no te has fijado.
Le has cautivado con tu corazón, está
esperando a que lo abras ten el valor.
No tengas miedo a no escuchar, Él
habla en el silencio y grita “eternidad”
Ama la vida que se te ha dado,
el amor con fuego en el pecho
grabado.
Porque no solo clavaron sus manos
y pies, clavaron su mirada en tu
alma también. En tu alma también,
en tu alma también.
He decidido que no te vas sin
recordarte en un momento cuál es tu
verdad.
Joven pringado, vestido de abrazos,
mecido desde siempre entre sus
manos.
Debes aprendes qué es el dolor, esa
entrega de rodillas que esconde su
amor.
Joven pringado encendido y elegido,
en la revolución del amor de Cristo.
Ama la vida que se te ha dado, el
amor con fuego en el pecho
grabado.
Porque no solo clavaron sus manos
y pies, clavaron su mirada en tu
alma también. En tu alma también,
en tu alma también.
He decidido que no te vas sin que
admires un momento lo guapa que
está mamá.
Madre del Cielo, de Hakuna y de mi
vida, cuanta belleza y valentía unidas.
Virgen del Abrazo, ayúdame a seguir
a tu Hijo, como hiciste tú con Él.
Madre querida, abrázame ya, pues
quiero estar loco y dar la vida de
verdad.
Ama la vida que se te ha dado, el
amor con fuego en el pecho
grabado.
Porque no solo clavaron sus manos
y pies, clavaron su mirada en tu
alma también. En tu alma también,
en tu alma también.
Ama la vida que se te ha dado, el
amor con fuego en el pecho grabado…
Bendito sea Dios, su santo nombre
Bendito Jesucristo, Dios de carne
Bendita creación que enmoró a su Creador
Bendito deseado y deseante
Bendito sea Dios su ardiente corazón
Su preciosa sangre, su presencia
apasionada en el altar
Bendito el Espíritu libre y amante
Bendita la Madre de Dios, José, los
ángeles, los santos
Bendito Cristo entre nosotros:
¡¡su familia!!
Uuuuuuuuuuuuu
Que da la vida
¡¡Bendito sea Dios que da la Vida!!
Llévame contigo a todos lados,
que pueda dormir tranquilo bajo tu
preciso manto
Llévame contigo, no me sueltes de la mano,
Y que cuando sienta frío, note tu
cálido abrazo.
Llévame contigo, a donde quieras,
Y es que no hay mayor consuelo que
una madre que te quiera y que algún
día pudiera, al Cielo ir por tu escalera
Y entender que contigo Madre
querida, valió la pena
Que no me canse nunca de mirarte
Y repetir cion humilde devoción:
Te quiero con locura preciosa Madre
Tú el mejor regalo de mi Dios
Que no me canse nunca de mirarte
Y repetir con humilde devoción:
Te quiero con locura preciosa Madre
Tú Madre de Hakuna y mi corazón.