ESTAMOS YA EN EL DESCANSO DE DIOS

🗓 11 de junio de 2025


Ven espíritu ven

Ven Espíritu ven,
y llénanos Señor
con tu preciosa unción. (x2)

Purifícanos y lávanos
renuévanos, restáuranos Señor
con tu poder
purifícanos y lávanos
renuévanos, restáuranos Señor
te queremos conocer.


Me sobrepasa

Tú me sondeas y me conoce s, cuando me siento o me levanto,
de lejos penetras mis pensamientos;
distingues mi camino y mi descanso,

Todas mis sendas te son familiares, conoces mis palabras.
Me estrechas, me cubres con tu palma.
Tanto saber me sobrepasa.


¿Adónde iré lejos de tu aliento,
adónde escaparé de tu mirada?
Allí estás tú, allí te encuentro.

Si vuelo hasta el margen de la aurora,
si emigro hasta el confín del mar,
Alli me alcanzará tu mano izquierda,
O tu derecha me agarrará.

Más si digo: «Que al menos la tiniebla me encubra, que la luz se haga noche en torno a mí»
La noche es clara como el dia.
La tiniebla no es oscura para ti

Tu has creado mis entrañas,
en el seno materno me tejiste.
Te doy gracias.

¿Adónde iré lejos de tu aliento,
adónde escaparé de tu mirada?
Allí estás tú, allí te encuentro.


Evangelio

Al anochecer de aquel día, el primero de la semana, estaban los discípulos en una casa, con las puertas cerradas por miedo a los judíos. Y en esto entró Jesús, se puso en medio y les dijo: «Paz a vosotros».
Y, diciendo esto, les enseñó las manos y el costado. Y los discípulos se llenaron de alegría al ver al Señor. Jesús repitió: «Paz a vosotros. Como el Padre me ha enviado, así también os envío yo».
Y, dicho esto, sopló sobre ellos y les dijo:
«Recibid el Espíritu Santo; a quienes les perdonéis los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengáis, les quedan retenidos».
——

VOZ EN OFF

Entras en mi vida.
Apareces delante de mí,
y se van todos mis miedos.
La alegría invade mi vida.
Tu presencia lo cambia todo.

Tenía la puerta cerrada,
Por miedo a que pasara algo malo.
No me atrevía ni a salir.
Todo pesaba,
Todo se me venía grande.

Pero aquí estás,
En este trozo de pan.
Delante de mí.
Enseñándome tus heridas.
Enseñándome que has llegado hasta el extremo por mi.
Que no me has dejado sola,
Que nos amas,
A todos y a cada uno.
Que estás con todos nosotros hasta el final.

Y yo sé que es verdad.
Que estás vivo,
Que eres real.
Ya no estoy sola,
Sino que vivo acompañada.
Porque el Padre y Tú, nos habéis enviado lo más valioso que tenéis: Vuestro espíritu.

Tu espíritu viene y va por toda la sala.
Derramalo sobre mi.
Aquí estoy.
Aquí tienes mi corazón.
Dispuesto a recibir tu espíritu,
Dispuesto a recibir tu amor.

Sopla fuertemente.
Envíame tu paz.
Envíame tu fuerza.
No quiero estar encerrada,
No quiero que el miedo se apodere de mí.
¡Sopla! Sopla tu espíritu sobre mi.

Abro la puerta para que entres.
Deseo que vengas.
Quiero recibir tu vida,
quiero recibir tu paz.
Quiero recibir todo lo que me das.
Para Vivir con alegría.
Quiero disfrutar verdaderamente de la vida.

Así que derrámaTe sobre mi,
DerrámaTe a cubos en nuestros corazones.
Envíanos adonde tú quieras que vayamos,
Me descalzo para vivir.
Soplanos tu Vida dada y entregada,
Soplanos todo tu amor.
Lo estamos deseando.
Y con tu fuerza y con tu paz,
Seremos capaces de amar y de entregarte toda nuestra vida,
Bebiendo hasta la última gota del cáliz.


La fila

La fila más importante de mi vida
Unos minutos me separan del momento.
De encontrarme con mi amante
cara a cara con Dios Carne.
No soy digno de que entres en mi casa
pero una palabra tuya bastará para sanarme.

Cada segundo se hace una eternidad,
si es para tenerte no importa esperar.
Y tengo este hormigueo que no cesa hasta que te veo.
Cada paso hacia adelante es un paso hacia el Cielo.

Y ligeramente elevado,
y con un Amén contestado.
Por fin frente a un Pan que se ha
hecho humano.

Y cuando el Cuerpo de Cristo,
se une a mí,
me transformo, me hago uno
con quién más me ama.
Ese el que sacia el hambre
de todo existir.
El sagrario hacia el que siempre
estoy arrodillada.

Si los Ángeles hablaran,
concienciarían nuestra alma.
Es el Rey de los amores,
quien nos alimenta y habla.
A quien todo el Cielo alaba. (x2)


Aprieto mis costados,
para que sientas mis abrazos.
Que Dios no está en el pan,
que Dios es este Pan,
que yo mismo lo he tocado
con mis labios.

Busca un hueco en mi corazón,
limpia todo lo que hay en mi interior
Que está boca que Tú tocas
solo sepa hablar el lenguaje,
el lenguaje del Amor.

Y cuando el Cuerpo de Cristo,
se une a mí,
me transformo, me hago uno
con quién más me ama.
Ese el que sacia el hambre
de todo existir.
El sagrario hacia el que siempre
estoy arrodillada.

Si los Ángeles hablaran,
concienciarían nuestra alma.
Es el Rey de los amores,
quien nos alimenta y habla.
A quien todo el Cielo alaba. (x2)


Y ahora que ya estás conmigo Señor,
hazme saber que estás vivo en mí.
Que no eres un alimento más,
que es tu cuerpo inmolado por mí.

Y ahora que ya estás conmigo Señor
hazme saber que estás vivo en mí.
Ahora ya soy miembro de tu Cuerpo,
unido a mis hermanos en Ti.

Y cuando el Cuerpo de Cristo,
se une a mí,
me transformo, me hago uno
con quién más me ama.
Ese el que sacia el hambre
de todo existir.
El sagrario hacia el que siempre
estoy arrodillada.

Si los Ángeles hablaran,
concienciarían nuestra alma.
Es el Rey de los amores,
quien nos alimenta y habla.
A quien todo el Cielo alaba. (x2)


Mirada

Mirada creadora creando,
la del salvador salvando.
Mirada de la Comunión,
amando

Mirada de misericordia
del amor crucificado,
mirada que penetra en mi alma,
un fuego abrasador.

Enséñame, ¡Oh Trinidad!,
cómo es tu libre mirada.
Enséñame, ¡Oh Trinidad!,
Pues es la más bella y preciada,
la más pura de amor.


Mirada de verdad sincera,
mirada de Rey que reina,
Mirada que envuelve mi vida
y purifica
Mirada del principio y fin
Mirada del Resucitado
Mirada que deslumbra con su luz
Y al cegar sana

Enséñame, ¡Oh Trinidad!,
cómo es tu libre mirada.
Enséñame, ¡Oh Trinidad!,
Pues es la más bella y preciada,
la más pura de amor.


Perdóname si cuando miro
miro sin mirar,
si estos ojos que me diste
no saben amar.
sólo veo cuerpos
solo veo humanidad
pero me pierdo, mi Señor,
toda divinidad.

Enséñame, ¡Oh Trinidad!,
cómo es tu libre mirada.
Enséñame, ¡Oh Trinidad!
Pues es la más bella y preciada,


Enséñame, ¡Oh Trinidad!,
cómo es tu libre mirada.
Enséñame, ¡Oh Trinidad!,
Si es la más bella y preciada,
la más pura de amor,
la más pura de amor.


Madre de Hakuna

Llévame contigo a todos lados,
que pueda dormir tranquilo bajo tu
preciso manto
Llévame contigo, no me sueltes de la mano,
Y que cuando sienta frío, note tu
cálido abrazo.

Llévame contigo, a donde quieras,
Y es que no hay mayor consuelo que
una madre que te quiera y que algún
día pudiera, al Cielo ir por tu escalera
Y entender que contigo Madre
querida, valió la pena

Que no me canse nunca de mirarte
Y repetir cion humilde devoción:
Te quiero con locura preciosa Madre
Tú el mejor regalo de mi Dios

Que no me canse nunca de mirarte
Y repetir con humilde devoción:
Te quiero con locura preciosa Madre
Tú Madre de Hakuna y mi corazón.