Ven Espíritu ven,
y llénanos Señor
con tu preciosa unción. (x2)
Purifícanos y lávanos
renuévanos, restáuranos Señor
con tu poder
purifícanos y lávanos
renuévanos, restáuranos Señor
te queremos conocer.
Vengo a gritarte los deseos
de mi corazón
porque a sus últimos repliegues
sólo tus manos llegan,
sólo
Conciénciame, Señor
Conciénciame, Señor
De ser tu amado por mí mismo
y no por mis actos
De ser no sólo deseado
sino imprescindible para ti
Mmmmmmm x3
De ser persona de tu confianza
a pesar de mi pasado
Mendigo de tu vida
de tu humanidad necesitado
De ser yo templo en que estás vivo
con infinita fuerza
De ser motivo de que Dios
se recree en mi belleza
Conciénciame, Señor
Conciénciame,
de ser el único que puede
saciar tu sed de mí
De no estar hecho para el éxito
sino para el amor
De no vivir para mí mismo
sino para la comunión
Mmmmmmm x3
De no vivir de sentimientos
sino sensibilidad
No querer cumplir mis metas
sino amar tu voluntad.
De ser uno de los llamados
a tu Revolución
De ser carne de Cristo,
cuerpo de mi Señor
Conciénciame, Señor
Conciénciame, Señooooooor
Conciénciame, Señor
Conciénciame,
de ser el único que puede
saciar tu sed de mí
Tú me sondeas y me conoce s, cuando me siento o me levanto,
de lejos penetras mis pensamientos;
distingues mi camino y mi descanso,
Todas mis sendas te son familiares, conoces mis palabras.
Me estrechas, me cubres con tu palma.
Tanto saber me sobrepasa.
¿Adónde iré lejos de tu aliento,
adónde escaparé de tu mirada?
Allí estás tú, allí te encuentro.
Si vuelo hasta el margen de la aurora,
si emigro hasta el confín del mar,
Alli me alcanzará tu mano izquierda,
O tu derecha me agarrará.
Más si digo: «Que al menos la tiniebla me encubra, que la luz se haga noche en torno a mí»
La noche es clara como el dia.
La tiniebla no es oscura para ti
Tu has creado mis entrañas,
en el seno materno me tejiste.
Te doy gracias.
¿Adónde iré lejos de tu aliento,
adónde escaparé de tu mirada?
Allí estás tú, allí te encuentro.
En aquel tiempo, la gente se agolpaba en torno a Jesús para oír la palabra de Dios. Estando él de pie junto al lago de Genesaret, vio dos barcas que estaban en la orilla; los pescadores, que habían desembarcado, estaban lavando las redes.
Subiendo a una de las barcas, que era la de Simón, le pidió que la apartara un poco de tierra. Desde la barca, sentado, enseñaba a la gente.
Cuando acabó de hablar, dijo a Simón:
«Rema mar adentro, y echad vuestras redes para la pesca».
Respondió Simón y dijo:
«Maestro, hemos estado bregando toda la noche y no hemos recogido nada; pero, por tu palabra, echaré las redes».
Y, puestos a la obra, hicieron una redada tan grande de peces que las redes comenzaban a reventarse. Entonces hicieron señas a los compañeros, que estaban en la otra barca, para que vinieran a echarles una mano. Vinieron y llenaron las dos barcas, hasta el punto de que casi se hundían. Al ver esto, Simón Pedro se echó a los pies de Jesús diciendo:
«Señor, apártate de mí, que soy un hombre pecador».
Y es que el estupor se había apoderado de él y de los que estaban con él, por la redada de peces que habían recogido; y lo mismo les pasaba a Santiago y Juan, hijos de Zebedeo, que eran compañeros de Simón.
Y Jesús dijo a Simón:
«No temas; desde ahora serás pescador de hombres».
Entonces sacaron las barcas a tierra y, dejándolo todo, lo siguieron.
"Yo he venido a traer fuego sobre la tierra, ¡y cómo desearía que ya estuviera ardiendo!"
Señor conozco el fuego del que me hablas, es el fuego de tu AMOR. Un amor que arde pero que no se consume. Ese fuego que anhela mi corazón y el mundo entero.
Señor, tú hoy me pides ser esa llama, esa luz que ayuda a iluminar a este mundo. Un mundo que tanto amas y por el que tanto sufres al verse tan necesitado de tu amor.
Ayúdame Señor, a que esa llama crezca en mí y permanezca siempre viva en mi corazón y que contagie a otros para hacer arder al mundo entero.
Que esa llama llegue a mi hogar, a mi familia, a mi trabajo, a mi universidad…
Regálame la Gracia de perseverar en el camino, a no dejarme llevar por la oscuridad del mundo. Señor quiero prender y ser instrumento tuyo y que mi único anhelo sea cumplir tu Voluntad.
Que en cada momento del día que me regalas solo crezca en mí esa llama. Que logre amar al prójimo, con ese Amor del que Tú tanto hablas y que a veces se me olvida. Que me entregue a los demás como Tú te entregas en cada Eucaristía.
Te pido que arda tu Espíritu en mí, dejarme amar y así poder amar como tu.
Quiero encontrarte
Quiero contarte mis planes, hacerte reir.
Quiero maravillarme
Quiero saber mirarte en la puesta de Sol
Quiero lo que Tú quieras
Quiero la fuerza que tienes para conquistar
Y a veces tengo vértigo,
no consigo apreciar
que sobran las palabras,
Basta con suspirar.
(x2)
Quiero entregarme
Quiero un mar de ilusiones poder navegar
Quiero abrirte la puerta
Quiero dejar que Tú seas la luz que hay en mí.
Y a veces tengo vértigo,
no consigo apreciar
que sobran las palabras,
basta con suspirar.
(x2)
Lerelerelerelere
lerelerelere
que sobran las palabras,
Basta con suspirar.
Y a veces tengo vértigo,
no consigo apreciar
que sobran las palabras,
basta con suspirar.
(x2)
Bendito sea Dios, su santo nombre
Bendito Jesucristo, Dios de carne
Bendita creación que enmoró a su Creador
Bendito deseado y deseante
Bendito sea Dios su ardiente corazón
Su preciosa sangre, su presencia
apasionada en el altar
Bendito el Espíritu libre y amante
Bendita la Madre de Dios, José, los
ángeles, los santos
Bendito Cristo entre nosotros:
¡¡su familia!!
Uuuuuuuuuuuuu
Que da la vida
¡¡Bendito sea Dios que da la Vida!!
Llévame contigo a todos lados,
que pueda dormir tranquilo bajo tu
preciso manto
Llévame contigo, no me sueltes de la mano,
Y que cuando sienta frío, note tu
cálido abrazo.
Llévame contigo, a donde quieras,
Y es que no hay mayor consuelo que
una madre que te quiera y que algún
día pudiera, al Cielo ir por tu escalera
Y entender que contigo Madre
querida, valió la pena
Que no me canse nunca de mirarte
Y repetir cion humilde devoción:
Te quiero con locura preciosa Madre
Tú el mejor regalo de mi Dios
Que no me canse nunca de mirarte
Y repetir con humilde devoción:
Te quiero con locura preciosa Madre
Tú Madre de Hakuna y mi corazón.