Ven Espíritu ven,
y llénanos Señor
con tu preciosa unción. (x2)
Purifícanos y lávanos
renuévanos, restáuranos Señor
con tu poder
purifícanos y lávanos
renuévanos, restáuranos Señor
te queremos conocer.
Quiero alcanzar el cielo con tus Pasos,
Quiero abrazar la vida con tus Manos,
Decir al mundo con tu Voz hasta
morir
Qué todo un Cielo es solo para mí…
Quiero estrenar mis ojos en tus
brazos,
Quiero besar el suelo con tus Labios,
Borrar la noche y dar a la herida
cicatriz.
Quiero empezar de nuevo solo en Ti.
Tomad, comed, me entrego por Amor
hasta el final.
Tomad, bebed, el Cielo entero sabe a
Vino y Pan.
Tomad, comed, me entrego por Amor
hasta el final.
Tomad, bebed, el Cielo entero sabe a
Vino y Pan.
Quiero pisar tu Huella en cada
espacio,
Quiero buscar, mirarte en todos
lados,
Perder la vida hoy y ganarla toda en
Ti.
Quiero empezar y terminar por Ti.
Tomad, comed, me entrego por Amor
hasta el final.
Tomad, bebed, el Cielo entero sabe a
Vino y Pan.
Tomad, comed, me entrego por Amor
hasta el final.
Tomad, bebed, el Cielo entero sabe a
Vino y Pan.
Tomad, comed, me entrego por Amor
hasta el final.
Tomad, bebed, el Cielo entero sabe a
Vino y Pan.
Del santo evangelio según san Lucas (9,11b-17):
En aquel tiempo, Jesús hablaba a la gente del reino y sanaba a los que tenían necesidad de curación. El día comenzaba a declinar. Entonces, acercándose los Doce, le dijeron: «Despide a la gente; que vayan a las aldeas y cortijos de alrededor a buscar alojamiento y comida, porque aquí estamos en descampado». Él les contestó: «Dadles vosotros de comer». Ellos replicaron: «No tenemos más que cinco panes y dos peces; a no ser que vayamos a comprar de comer para toda esta gente». Porque eran unos cinco mil hombres. Entonces dijo a sus discípulos: «Haced que se sienten en grupos de unos cincuenta cada uno». Lo hicieron así y dispusieron que se sentaran todos. Entonces, tomando él los cinco panes y los dos peces y alzando la mirada al cielo, pronunció la bendición sobre ellos, los partió y se los iba dando a los discípulos para que se los sirvieran a la gente. Comieron todos y se saciaron, y recogieron lo que les había sobrado: doce cestos de trozos.
Uno contigo
Este es el sacramento de nuestra fe.
Tu cuerpo en un trozo de pan.
Tu sangre en un poco de vino.
Nada más.
Sólo tú.
Sólo tu persona.
Solo tu humanidad.
Solo tu vida que es la verdadera vida.
En este pan está mi fe.
Mirarte ahora es mi fe.
No sentir nada, también es mi fe.
Comer tu cuerpo es mi fe.
Abrazarlo, apretarlo, quererlo, es mi fe.
Que me mandes dar de comer a 5000 y no entienda nada, también es mi fe.
Quedarme con la boca abierta con cada una de tus respuestas, es mi fe.
Así.
Sabiendo que contigo no me falta nada.
Sabiendo que eres el único que puede saciarme.
Que eres cuerpo,
Que eres carne,
que eres persona,
Que eres corazón.
Que por eso conoces mi hambre y mi sed.
Que por eso sabes que estoy aquí esperando a que me des de comer.
Tú ya sabes lo que necesito.
Tú ya sabes lo que vivo.
Jesús, cada vez que eres levantado al cielo,
Cada vez que me arrodillo delante de este trozo de pan,
Sé que me miras.
Que tu mirada sacia mi mirada.
Y que también me pide que sacie la del mundo.
Me miras y me pides que yo también les de de comer.
Que esto que veo yo lo puedan ver todos,
Que esto que abrazo yo lo puedan abrazar todos.
Por eso hoy sólo quiero pegarme a ti.
No separarme ni un centímetro.
Abrazarte con lo más profundo de mi alma.
Dejarte hacer,
Dejar que me enseñes,
Dejar que me lleves.
Y ser uno contigo.
Porque sólo en tu cuerpo está la Vida,
Y sólo siendo uno contigo puedo vivirla.
La verdad en la que vivimos:
Cristo a pesar de su condición divina,
por amor se desprendió de su rango
pasando por uno de tantos, y tomó
condición de esclavo.
Y así, actuando como un hombre cualquiera,
se rebajó hasta someterse incluso a la muerte,
y una muerte en la Cruz.
Por eso Dios lo levantó sobre el mundo entero.
Por eso Dios le concedió el Nombre sobre todo nombre.
Por eso Dios lo levantó sobre el universo.
Por eso Dios le concedió el Nombre sobre todo nombre.
Al nombre de Jesús toda lengua proclame:
Cristo es el Señor para gloria del Padre.
Toda rodilla se doble en el Cielo, en el
Cielo, Tierra y abismo,
que se grite su Nombre.
Y así, actuando como un hombre cualquiera,
se rebajó hasta someterse incluso a la muerte,
y una muerte en la Cruz.
Por eso Dios lo levantó sobre el mundo entero.
Por eso Dios le concedió el Nombre sobre todo nombre.
Por eso Dios lo levantó sobre el universo.
Por eso Dios le concedió el Nombre sobre todo nombre.
Nombre sobre todo nombre, mi Salvador.
Nombre sobre todo nombre, mi Redentor.
Nombre sobre todo nombre, sobre todo te levanto.
Por tu Iglesia, que te espera a oscuras,
por tu pueblo que te reza aguardando
la aurora.
Te rogamos, te rogamos.
Por las naciones paganas,
que tienen sed de ti sin saberlo.
Ten piedad, ten piedad.
Por los pueblos oprimidos por el
totalitarismo
y la opresión de la mentira.
Por aquellos perseguidos por tu
nombre, que se ocultan para orar
y aquellos extraídos de su hogar.
Por sus perseguidores,
cegados por el odio,
“Perdónales, Padre,
no saben lo que hacen.”
Por los que no nos aman,
por los que no sabemos amar.
Por los que sufren y agonizan
y hoy duermen en el hospital.
Por los que es su última noche
y cuyos ojos no verán el nuevo día.
Ten piedad, ten piedad.
Por todos los que sufren la tentación
del suicidio,
por los dispuestos a dejar ganar al
mal.
Por aquellos cuyas noches son
interminables,
y a los que la angustia
les ha quitado la paz.
Kyrie Eleison, Kyrie Eleison.
Kyrie Eleison, Kyrie Eleison,
Kyrie Eleison.
Por aquellos que trabajan en la
prostitución
y se ven obligados a vender su amor.
Por los que caen en la trampa
del vicio y las drogas.
Por los que hoy duermen en prisión,
por los que hoy esperan su ejecución,
por aquellos a los que torturan,
Por criminales, por los ladrones,
por los que erran en soledad,
por los que sufren
la indiferencia de los demás.
Kyrie Eleison, Kyrie Eleison.
Por la ciudad,
por todos sus habitantes,
que en sus sueños solo existas Tú.
Por nuestros difuntos que aún no han
visto tu Rostro,
por los alejados entre la multitud.
Por los niños que descansan en el
seno de su madre,
por las mujeres que van a dar a luz.
Para que reine tu paz en cada hogar,
por los que quieren
saciar tu sed de amar.
Kyrie Eleison, Kyrie Eleison.
Kyrie Eleison, Kyrie Eleison,
Kyrie Eleison.
Ten piedad (x10)
Ten piedad, Señor, ten piedad.
Bendito sea Dios, su santo nombre
Bendito Jesucristo, Dios de carne
Bendita creación que enmoró a su Creador
Bendito deseado y deseante
Bendito sea Dios su ardiente corazón
Su preciosa sangre, su presencia
apasionada en el altar
Bendito el Espíritu libre y amante
Bendita la Madre de Dios, José, los
ángeles, los santos
Bendito Cristo entre nosotros:
¡¡su familia!!
Uuuuuuuuuuuuu
Que da la vida
¡¡Bendito sea Dios que da la Vida!!
Llévame contigo a todos lados,
que pueda dormir tranquilo bajo tu
preciso manto
Llévame contigo, no me sueltes de la mano,
Y que cuando sienta frío, note tu
cálido abrazo.
Llévame contigo, a donde quieras,
Y es que no hay mayor consuelo que
una madre que te quiera y que algún
día pudiera, al Cielo ir por tu escalera
Y entender que contigo Madre
querida, valió la pena
Que no me canse nunca de mirarte
Y repetir cion humilde devoción:
Te quiero con locura preciosa Madre
Tú el mejor regalo de mi Dios
Que no me canse nunca de mirarte
Y repetir con humilde devoción:
Te quiero con locura preciosa Madre
Tú Madre de Hakuna y mi corazón.