Icono del sitio J&L | Web y comunicación

e-commerce: Pasarelas de pago

Tal vez no hayas oido hablar nunca de las pasarelas de pago, pero estás mucho más familiarizado con ellas de lo que piensas.

Las pasarelas de pago de una tienda online son los sistemas que facilitan el pago de las compras. Permiten, por ejemplo, realizar un pago con tarjeta. Aunque ésta no es la única posibilidad.

¿Cómo funcionan las pasarelas de pago?

El funcionamiento de esos sistemas tiene tres fases:

  1. Envío de datos a la plataforma de pago.
  2. Pago en la plataforma externa.
  3. Información de pago.

Envío de datos a la plataforma de pago

Tu comprador ha seleccionado los productos que desea. Los ha añadido al carrito. Ha confirmado su pedido, seleccionado el método de envío, introducido sus datos y se dispone a pagar.

Cuando pulsa el botón de «Pagar», una parte de esos datos (al menos, el importe total y una referencia del pedido) se envían a la plataforma de pago, que se encargará de realizar el cobro por ti.

Pago en la plataforma externa

Esta plataforma puede ser de un banco o de otro tipo de intermediario (lo veremos más adelante).

En ella, el comprador introduce de manera segura sus datos. Por ejemplo, el número de su tarjeta de crédito, la fecha de caducidad y el código de seguridad cvv (los tres dígitos que aparecen por detrás).

Con esos datos (u otros), la pasarela de pago valida la operación, realiza el cobro y te hace llegar el importe.

El comprador introduce de manera segura sus datos.

Información de pago

El proceso de pago se ha realizado en una pasarela externa. Para que sepas que el proceso a concluido, ésta se comunica con tu e-commerce para indicarle que el proceso se ha completado correctamente y puedes marcar el pedido como «pagado». En caso contrario, enviará un mensaje de error para que tanto cliente como vendedor sepan que no se ha podido completar.

¿Qué pasarelas y medios de pago hay?

La lista es enorme. Continuamente están surgiendo nuevos métodos y plataformas de pago. Aquí veremos algunas de las más usadas y varios ejemplos.

Transferencia directa

Es el sistema más básico. Podríamos discutir si considerarlo pasarela de pago. Aunque tiene los tres pasos anteriores, la comunicación entre la web y el banco es manual.

Tras confirmar el pedido, el comprador recibe la información de pago: Importe, número de cuenta y concepto. Con ello, debe realizar una transferencia o ingreso, ya sea desde su banca a distancia, en un cajero, o por el método tradicional en la ventanilla del banco.

Para demostrar el pago, puede enviar el justificante. Esta información también puede ser validada por el vendedor comprobando los movimientos de su cuenta. Verá que existe un ingreso/transferencia con el concepto correspondiente.

Facilitan el pago de las compras

Ventajas

Inconvenientes

TPV Virtual bancario

Sirve para pagar con tarjeta. Es el equivalente al datáfono que encontramos en la mayoría de negocios físicos.

El cliente paga son su tarjeta de crédito/débito introduciendo los datos que el banco le pida.

Respecto a sus costes, encontramos tres tipos:

Cuando se dispone de datáfono físico, generalmente los costes son menores, ya que los bancos suelen considerarlo como una extensión del servicio. Por ello, es frecuente que mejoren las condiciones.

Ventajas

Inconvenientes

Intermediarios digitales

Por ese nombre puede que no los identifiques, pero son pasarelas de pago como PayPal o Stripe.

Estos servicios cobran en tu nombre y retienen el importe en tu cuenta de la plataforma hasta que lo transfieras a tu cuenta bancaria.

Ventajas

Inconvenientes

Otros tipos de pasarelas

Existen otras pasarelas de pago menos conocidas que permiten, por ejemplo, el pago con criptomonedas. Pero en esta ocasión no les dedicaremos mayor atención.

¿Qué plataforma me conviene?

Para saber cuál (o cuales) de las mencionadas plataformas de pago conviene a tu negocio es necesario hacer una previsión de ventas.

Esta previsión debe incluir tres aspectos:

  1. El número de operaciones de venta.
  2. El importe de cada una de ellas.
  3. Si tienes tienda física con datáfono.

Si esperas pocas ventas, pero de un importe medio-alto, podrías plantear la transferencia bancaria, ya que, al ser pocas, podrás revisarlas una a una. Al ser un importe medio-alto, el tiempo destinado a ellos quedará compensado por los beneficios. De este modo, no tendrás gastos financieros asociados a cada venta.

En caso de que preveas un volumen de ventas bajo o medio-bajo, irregular, o prefieras no arriesgar aún, puedes recurrir a plataformas intermediarias. Así solo tendrás costes financieros si tienes beneficios. Eso sí, ten en cuenta que las comisiones deben estar cubiertas por tu margen de beneficios (recuerda que te cobrarán un importe fijo por operación más un porcentaje).

Si tienes datáfono, esperas realizar muchas ventas y los importes de tus ventas pueden ser pequeños, te interesará un TPV Virtual.

Menudo lío. ¿Con cuál me quedo?

Si estás empezando y no lo tienes claro, empieza asegurando. Activa transferencia y algún sistema como Stripe o Paypal.

Cuando tu negocio crezca y tengas datos reales podrás plantearte inversiones mayores y gastos fijos si ello mejora tu margen de beneficios.

Salir de la versión móvil